Creamos diseños emocionantes basados en la economía circular, mediante un taller creativo de búsqueda y experimentación constante, integrado por un equipo colaborativo.
Muchas veces vemos y habitamos edificios sin darnos cuenta que está pasando y que pasó para que lo hagamos de esa manera. Detrás de toda obra hay infinidad de factores, a veces más tangibles y muchas, muchas veces intangibles. No siempre la obra y su génesis responden a una formula o proceso lineal. Influyen diversos factores, desde el sitio y su cliente, hasta la búsqueda conjunta en un proceso co-creativo.
Pero por detrás hay una búsqueda creativa constante en donde, no solo desde la arquitectura, sino desde varias disciplinas, nos acercamos a lo que luego, de alguna manera se vuelca en la obra arquitectónica. Mas allá del oficio y lo científico de la arquitectura, hay arte, y el arte es un reflejo de nuestra sociedad, y allí hay muchas maneras de canalizarlo. Nuestra tarea es ponernos al servicio y ser receptivos a ellas, así como de fomentar su búsqueda. Es por eso que el Atelier responde al taller creativo de búsqueda y exploración constante, al proceso y a la evolución.
Ya que hablamos de arte, el proceso arquitectónico lo vemos como una una obra musical de improvisación pura.
Conocemos las reglas, entendemos los parámetros, y arrancamos sin saber cuál va a ser el resultado exacto. Para ello hay pura confianza y respeto por el proceso. Siempre se llega a una resultado único y bello. Aceptamos la experiencia que nos dio el oficio, pero valoramos mucho lo que surge. Hay evolución constante, y cada obra es un instante de ese proceso, por eso el respeto y el valor por esto. El resultado nuevo siempre es mejor ya que en la evolución hay aprendizaje y maestría.
Hoy en día la tecnología basada en la parametrización nos abrió un mundo de potencialidades muy amplio. Ayudados del diseño paramétrico y la documentación en BIM, logramos una eficiencia en los procesos que nos da lugar a la exploración constante.
Este uso de la tecnología al servicio del diseño por un lado, y por otro, al servicio de los oficios más ancestrales genera resultados únicos, innovadores, sencillos y que antes nos hubiese sido imposible si quiera soñar.
Por eso hay una exploración constante en técnicas de diferentes oficios y una exploración desde la matemática y la parametrización. En conjunto, infinidad de resultados nuevos.
La música evidencia el ritmo, el silencio, la armonía, melodía y la fluidez. Esto es un valor único lleno de información para poner al servicio de la arquitectura.
Tanto la arquitectura como la música son responsables de nuestro estado de ánimo. Son capaces de generar emociones únicas. Allí es donde el ritmo, la estructura, el silencio, la armonía y la melodía juegan un papel primario. No hay obra sin ritmo y estructura, como no hay emoción sin antes armonía y melodía.
En la búsqueda de ser generadores de emociones, hay una danza constante entre música y arquitectura. Por momentos la respuesta viene de un lado y por momentos del otro. Solo hay que ir explorando y abriendo bien los sentidos.
Para escuchar el proceso compositivo desde la óptica musical:
https://open.spotify.com/artist/4HMooDkAgGkywQJWViFBVs
El eje de todo lo que realizamos es siempre en relación a la sustentabilidad. Concepto que lo concebimos como un camino y no como una meta. No tiene el mas mínimo sentido generar sistemas, generar edificios en los cuales propongamos sistemas de habitar inalcanzables, carecería de sentido. Es entonces que el objetivo lo centramos en el camino de la sustentabilidad, ir incorporando hábitos y prácticas impulsadas por el diseño para mejorar la calidad de vida, no solo del usuario directo e indirecto, sino de las generaciones futuras.
Hoy en dia esto lo trabajamos bajo los conceptos de ECONOMÍA y DURABILIDAD. Cuanto sale tu edificio? Cuanto dura? Cuanto consume? Qué impacto implica construirlo?
En la naturaleza no existe el concepto de basura. Lo que muere por un lado genera vida por otro. Esto nos da una idea general que en algún momento abandonamos y que nos acostumbramos a formas ilógicas constantes.
Bajo esta mirada, el desafía es generar circuitos cerrados en donde cambiemos el hábito de como concebimos tanto las obras como su habitar. Esto depende exclusivamente de nosotros quienes diseñamos el habitar, y es momento de hacernos cargo de esta pesada herencia.
No podemos estar dependiendo de decisiones politicas y economicas, esperando que otras industrias tomen la iniciativa, tenemos que ubicarnos en el centro de la escena, proponer y hacer.
En este camino del cual estamos convencidos y el cual nos apasiona para seguir profundizando y evolucionando aparece un ideal aun mas alla del horizonte, la arquitectura productiva.
Muchas generaciones nos educaron a pensar en el habitar como una manera de consumir tomando de la red y desechar casi sin saber a donde. En este proceso evolutivo, una vez que logramos sortear estos dos grandes ítems aparece este nuevo. Ya no solo no depender de los servicios ajenos, sino ir camino a la autosuficiencia. Los edificios que creamos no solo tienen que sobrevivir consumiendo la menor cantidad de recursos, deberían generarlos y en demasía.
Ya no estamos en un punto en el que queremos realizar el menor impacto posible, tenemos que dar vuelta la pagina y generar el mejor, pero buen, impacto posible.
Matias Mosquera
Socio Fundador
Camila Gianicolo
Arquitecta Socia
Milagros Vita
Administración y RRHH, Socia
Francisco Gómez Paratcha
Arquitecto
Cristian Grasso
Arquitecto
Carolina Tobar
Arquitecta
Marcelo Vita
Ingeniero Civil
Paulina Szabo
Arquitecta
Maru de Elizalde
CFO
Jeff Arias
Arquitecto
Matias Mosquera, Arquitecto, Músico, nacido en 1985 en Buenos Aires, Argentina. Estudió en la Universidad de Buenos Aires. Luego de formar parte del equipo de diseño de 3XN en Dinamarca 2011/12, co-fundó el estudio BAM! Arquitectura con el cual obtuvieron grandes reconocimientos por su trabajo en los años 2012/20. Participaron y fueron reconocidos en Bienales de arquitectura y otras distinciones internacionales. En el año 2020, junto a un gran equipo, formó AtelierM en donde se profundizó el trabajo y la exploración sobre la arquitectura en diferentes escalas y regiones, generando así una oficina de vanguardia y búsqueda constante. En el ámbito académico, es docente de la materia Diseño Arquitectónico en la Universidad de Buenos Aires desde el 2018 hasta la actualidad. . Su obra ha sido publicada en más de 100 países. Entre ellos, Divisare, Archdaily, Designboom, Dezeen, Clarin Arquitectura, Revista Trama, Living, Homify, Landscape Design, Casas Internacional, Arqa, 1:1, 30-60, Archilover, Architizer, Archello, Barzon, Detail, Design Milk, Catalogo Arquitectura.
2024 Premio Obra Construida CAPBA, Vivienda. 2do lugar, LuMa (Arg)
2024 Bienal Internacional de Arquitectura de Buenos Aires, Obra seleccionada, LuMa
2024 Exposición "Arquitectura Intermedia", MARQ (Arg)
2023 Mejor estudio de arquitectura en Argentina. Luxury (NY)
2022 Golden Trezzini Awards (Rus), Mención de Honor, ZigZag
2022 Golden Trezzini Awards (Rus), Mención de Honor, MeCa
2022 Bienal Internacional de Arquitectura de Buenos Aires, Obra seleccionada, MeCa
2021 Golden Trezzini Awards (Rus), Mención Especial, Shire
2021 Golden Trezzini Awards (Rus), Mención Especial, MaTo
2019 Ranking Excelencia Profesional Clarín (Arg), Voces emergentes y generación intermedia. Sexto lugar.
2017 Concurso Vivienda sustentable Puertos (Arg), Primer Premio.
2017 Bienal Internacional de Arquitectura de Buenos Aires (Arg), Finalista, MeMo.
2017 Bienal de Diseño Fadu, UBA (Arg), Finalista, MeMo.
2017 Archdaily, Obra del año (US), Finalista, MeMo.
2016 Ecoparque Interactivo (Arg), Mención Honorífica
2013 Concurso Impatec (Arg), Primer Premio
2011 Oficinas RRHH, GR (Arg), Primer Premio
2010 Pabellón Bicentenario, SCA (Arg), Mención Honorífica
email
info@atelierm.ar
IN
ateliermm
dirección
Juan José Díaz 594
San Isidro - Buenos Aires - Argentina
Ubicación
Kitakaruizawa, Japón
Año
2024
Equipo
Matias Mosquera, Francisco Gomez Paratcha, Camila Gianicolo, Cristian Grasso, Dante Marinari
Esta casa está diseñada para fusionarse perfectamente con el paisaje dinámico y en constante cambio del bosque de Kitakaruizawa, donde la vegetación densa domina en los meses más cálidos, y la nieve cubre el terreno durante el invierno. El sitio, con su pendiente pronunciada y topografía irregular, presenta tanto desafíos como oportunidades. En lugar de imponerse sobre la tierra, la casa busca abrazar estas condiciones naturales, trabajando con los contornos existentes y las grandes rocas dispersas a lo largo del terreno. El concepto detrás del diseño es crear una casa que se sienta enraizada en el paisaje, realzando las características naturales mientras ofrece una experiencia profundamente inmersiva para quienes la habitan. Al hacerlo, la arquitectura se convierte en parte del entorno, permitiendo a los usuarios interactuar con el bosque de maneras nuevas y significativas.
El propio terreno juega un papel crucial en la conformación de la arquitectura. La casa está diseñada con un único techo que se eleva en consonancia con la pendiente, siguiendo el flujo natural de la tierra. Este gesto permite que el edificio se integre al sitio de manera orgánica, como si la estructura emergiera naturalmente de la tierra. La intención del diseño es proporcionar una transición gradual entre el exterior y el interior, donde cada movimiento dentro de la casa se convierte en parte de una experiencia más amplia. La decisión de alinear el techo con la pendiente también crea una dinámica espacial única en el interior, donde cada habitación está posicionada para interactuar con la topografía de diferentes maneras, brindando a los usuarios una mayor conexión con el entorno natural.
El interior de la casa se organiza bajo el concepto de “caja dentro de una caja”, lo que permite una disposición estratificada de los espacios. Las áreas principales de la casa se ubican en los extremos, creando puntos focales que enmarcan vistas del bosque circundante y las montañas distantes. Estos espacios son donde la interacción con el entorno es más intensa, permitiendo que la luz natural inunde el interior y ofreciendo vistas sin obstáculos del paisaje cambiante. En contraste, las áreas de servicio se colocan en una segunda capa dentro de la estructura, discretamente ubicadas para mantener el enfoque en los espacios principales de la vivienda. Esta disposición cuidadosa de los espacios crea una sensación de progresión, invitando a la exploración y la sorpresa a medida que uno se mueve por la casa.
Una vez dentro, la casa se revela como una experiencia completamente diferente. Mientras que el exterior se armoniza con el entorno natural, el interior se transforma en un espacio que trasciende lo ordinario. El diseño cambia de una simplicidad enraizada a una atmósfera más etérea y sorprendente. La intención es transportar a los usuarios a otra dimensión, creando un entorno que evoque un sentido de asombro y curiosidad. Esta transformación interior juega con los contrastes: luz y sombra, espacios abiertos y cerrados, guiando a los habitantes a través de una secuencia cuidadosamente curada de experiencias que van más allá de la mera funcionalidad.
Externamente, la casa utiliza técnicas de construcción tradicionales, como el revestimiento de madera carbonizada y un techo inclinado. Estos elementos sirven para conectar la casa con su contexto cultural y ambiental, fusionándola con el bosque mientras ofrece protección contra los elementos. El uso de la madera carbonizada, en particular, no solo proporciona una fachada duradera y de bajo mantenimiento, sino que también agrega una cualidad textural que resuena con la naturaleza robusta del sitio. El techo inclinado, una forma familiar en la arquitectura tradicional japonesa, ancla aún más la casa en su contexto local, al tiempo que insinúa sutilmente la experiencia única que espera en el interior.
La casa ofrece más que solo refugio; está diseñada para ser una experiencia en sí misma. La arquitectura fomenta un sentido de descubrimiento y asombro, alentando a los usuarios a interactuar con su entorno de maneras inesperadas. Desde la armonía de la casa con su entorno inmediato hasta la transición hacia sus espacios interiores, el diseño tiene como objetivo inspirar un estado de asombro continuo. Al combinar técnicas de construcción tradicionales con conceptos espaciales modernos, la casa crea un diálogo único entre el pasado y el presente, la naturaleza y la arquitectura, la simplicidad y la transformación, convirtiéndola en una experiencia inolvidable para todos los que entran.